SLS AMG para un español

Marco Calvo, un madrileño de solo 24 años que ha ganado un Mercedes SLS AMG con Gran Turismo 5. La Signature Edition del juego contenía un código para inscribirse en un concurso en el que jugadores de 22 países se enfrentarían a nivel virtual a los mandos de un Mercedes SLS AMG en el juego.

El momento cumbre tuvo lugar el pasado día 12 de julio en el circuito Red Bull Ring, situado al sur de Austria. Después de enfrentarse virtualmente el día anterior los 15 finalistas de 15 países distintos, todos ellos se pusieron a los mandos de ocho Mercedes SLS AMG de verdad para superar las pruebas que les habían preparado.

Sus monitores eran ni más ni menos que el ex piloto de Fórmula 1 David Coulthard y Bernd Schneider, antiguo piloto del DTM. Regularidad, obstáculos y precisión en varias pruebas en las que debían domar los 571 caballos del Mercedes SLS AMG.

Y como siempre, el ganador no podía ser otro que un español. Ganamos en tenis, en futbol, en las motos y de vez en cuando en la Fórmula 1. Y también un español ha ganado en este concurso organizado por Play Station y Mercedes.

Ahora, un Mercedes SLS AMG especialmente personalizado se fabricará para él. Todavía tenía dudas se si lo pedirá en color negro o plata, pero ya se ve andando con él por Madrid. Sin duda el segundo es el color que más pega en este coche. Enhorabuena. 

hertz y Lotus unidos.

La empresa de alquiler Hertz incorpora el Lotus Evora a su gama de coches de placer, denominada Fun Collection, junto al BMW Z4 y similares. Se podrá alquilar desde 250 euros diarios en varios lugares de Europa. En España estará localizable en Madrid, Barcelona y Marbella.

No es oro todo lo que reluce, tenemos que haber cumplido 30 años y tener dos tarjetas de crédito. Es comprensible que tomen sus precauciones porque todos sabemos lo que se le hace a veces a los coches de alquiler. El precio quizás parezca muy alto, pero es razonable.

El Evora, en la configuración 2+2, cuesta en España casi 75.000 euros. Tiene un consumo soportable para sus 280 CV, 8,7 l/100 km de gasolina. Para los viajeros europeos, se puede reservar en Francia, Alemania, Reino Unido e Italia (¿alguien dijo sentirse como un Carabinieri?).

Condenan a la DGT por multar a un conductor por no llevar las luces (un día soleado)

Si esto es así en España somos de listos, mangantes y quijotes y si podemos robar mejor, a un pobre hombre que esta es su historia.

El 9 de mayo de 2010, la Dirección General de Tráfico impuso una multa de 150 euros a un conductor por “circular sin ningún tipo de alumbrado en situación de falta o disminución de visibilidad por las condiciones meteorológicas o ambientales como consecuencia de la lluvia”. La Guardia Civil multó al conductor, cuando circulaba por la A4 sentido Cádiz, porque no llevaba las luces a pesar de estar lloviendo.

El caso es que el conductor en cuestión no estaba de acuerdo con la sanción, ya que según él, sí es cierto que estuviera tal día a tal hora en la A4, pero no había problemas de visibilidad, ya que en ese momento no llovía, o si lo hacía era tan débil que ni se apreciaba, por lo que no tenía porqué llevar las luces encendidas.

Así que el conductor presentó el recurso contra la multa en la DGT, y de paso lo acompañó con un informe de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), para que acreditara el parte meteorológico con análisis pluviométrico en la fecha y zona donde se efectuó la denuncia (que decía que no había llovido).

El caso es que la DGT rechazó las alegaciones presentadas, y ratificó la multa de 150 euros. Como el conductor tenía claro que llevaba la razón, interpuso un recurso de alzada pidiendo nuevamente el archivo de la sanción (y de nuevo adjuntó el certificado de la AEMET). La DGT no respondió, así que el recurso se desestimó por silencio administrativo.

Y el conductor, que no tenía ganas de pagar una multa que no le correspondía, decidió entonces ir a los tribunales. En cuanto la DGT se enteró de esto, revocó la resolución que ratificaba la multa, y dejó sin efecto la sanción impuesta. El conductor había ganado, pero no estaba de acuerdo con la actuación de la DGT.

Según él, la DGT había actuado de mala fe, y decidió quejarse ante el juzgado, porque Tráfico “no revocó la sanción administrativa hasta que no se cercioró de que el conductor solicitó auxilio judicial para lo que consideraba una sanción injusta”. El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 6 de Sevilla, finalmente condena a la DGT a pagar las costas judiciales de todo este lío.

Aquí tenemos un caso claro en el que el conductor sancionado tenía argumentos y pruebas sólidos para recurrir una multa (ojo que no siempre es así), pero fueron ignorados por la DGT hasta el último momento. Aún así, cuando se tiene razón, se tiene razón. Hubiera estado muy bien no haber tenido que llegar a los tribunales.